Mientras crecía, no recuerdo una sola vez en que se hablara de la salud mental de los hombres. No recuerdo una sola vez en que me dijeran que uno de ellos sufriera por algo. Y tal vez era así, tal vez no tenían ningún problema, pero por probabilidad, seguramente existía, tan solo no se hablaba de ello.
El tío enojón, el compadre que bebía, el amigo que de pronto ya no quería salir con nadie, se aislaba y todos pensaban que era mala onda… Tal vez estaban atravesando por problemas de salud mental, pero nadie lo sabía, porque en aquel entonces no se hablaba de ello.
Es una cosa generacional, y parte del trabajo que estamos haciendo al hablar de estos temas es romper el estigma y decirles a tantos hombres que su salud mental importa. Porque los queremos y los necesitamos bien.
Se acerca el día del padre y no puedo evitar pensar en su gran rol en esta vida. La responsabilidad de una familia, y la crianza de los hijos, ser la imagen paterna para hijos e hijas, que un día crecerán inspirados por lo que vivieron en su hogar.
Papás, los queremos sanos, porque un papá amoroso y amable, presente y sano es fundamental para criar hijos sanos, felices, con un mejor futuro. Los queremos sanos porque les amamos.
Durante el tiempo que estuve dando clases de Primeros Auxilios para la Salud Mental, escuché muchas historias, casi siempre venían de mujeres que me hablaban de sus hijos, de sus esposos, y esas batallas silenciosas que enfrentaban en soledad, y en las que ellas se sentían impotentes para ayudarles. En ocasiones también platiqué con hombres que venían buscando apoyo para salir adelante de alguna situación que les estaba rebasando.
Lo primero que quisiera decirles es que no están solos. Hay muchos hombres atravesando retos de salud mental, porque son de lo más frecuentes.
Cualquier persona puede presentar un problema de salud mental a lo largo de su vida, así como cualquiera puede sufrir un accidente o enfermar de algo. Lo importante es saber detectarlo y reconocer la fortaleza en buscar ayuda e información profesional.
Las cifras nos dicen que los hombres fallecen por suicidio tres veces más que las mujeres, y que a su vez, es menos probable que busquen ayuda psicológica. Si al miedo al estigma, sumamos la falta de seguro médico, o el miedo por el estatus migratorio, podemos entender por qué muchas veces prefieren callar.
Hay tantas mentes como cuerpos, y aunque hay padecimientos que no se pueden ver no significa que son reales. Somos cuerpo y mente, y no podemos separar uno del otro. Para poder funcionar necesitamos estar bien desde la raíz, desde nuestra mente.
A veces puedes pensar que no tienes nada, solo eres enojón, que solo tienes que tomar una cerveza para relajarte, o comer para sentirte mejor… todas esas cosas que a veces no identificamos (pero que tal vez alguien cercano ya te haya mencionado) pueden ser la señal de que tu mente está pasando por una situación de estrés o un reto de salud mental.
Presta atención a los síntomas más frecuentes: Cambios bruscos en tu estado de ánimo, no poder dormir bien, o dormir demasiado, sentir que no puedes lidiar con la vida diaria, que los problemas te rebasan, sentirte sin esperanza, comenzar a tomar alcohol o usar drogas con más frecuencia, enojarte con facilidad, estar cansado, sentir miedo o tristeza extrema y que no se va facilmente, subir o bajar mucho de peso.
Si esa situación se prolonga por más de dos semanas y no te deja funcionar adecuadamente en tus relaciones, en el trabajo o en tu vida social, es momento de buscar ayuda.
El primer paso es buscar la información profesional correcta, para empezar a entender por lo que estás pasando y buscar las opciones con las que cuentas para empezar a mejorar. Que el miedo a lo que los demás puedan pensar no te impidan encontrar tu camino hacia la recuperación.
Lo segundo será recibir el tratamiento adecuado y hacer los ajustes necesarios en tu vida para que recuperes tu estabilidad y vuelvas a sentirte tú mismo.
Estos son algunos de los recursos locales disponibles, confidenciales, y con apoyo para personas sin seguro médico:
La Línea de Crisis de Colorado: 844-493-8255 o envía un texto a “TALK” al 38255
Mountain Family Health Centers: 970-945-2840
Mind Springs: 970-683-7131
Tome un cuestionario de evaluación de su salud mental en Español visitando screening.mentalhealthscreening.org/hyho