Lauren Gister viajará a Carbondale con su border collie, Apollo, un perro de servicio retirado. “Caminamos cientos de millas”, dijo a The Sopris Sun. Foto de cortesía

Traducción por Dolores Duarte 

El 17 de enero, Carbondale dará la bienvenida a Lauren Gister como la siguiente gestora municipal. Gister actualmente reside en Chester, Connecticut, donde cumple su cuarto gestión como primera concejal.

Nota del editor: Esta entrevista ha sido editada por razones de espacio y claridad.

Sopris Sun: ¡Felicitaciones!

Lauren Gister: Gracias. Estoy muy emocionada de venir a Carbondale.

SS: Nos conocimos brevemente hace unas semanas. ¿Cuáles fueron tus primeras impresiones de Carbondale?

LG: Una de las cosas que me atrajo inmediatamente de Carbondale es que todas las cosas que me gustan del lugar donde estoy ahora parecen estar presentes en el, además de otras cosas que me emocionan. Más diversidad, más sol, más cielo. La inclinación artística de la ciudad es fantástica. Me encanta el hecho de que haya una buena mezcla de gente, diversidad étnica, rancheros, artistas, hippies, profesionales, aventureros del esquí. Parece una comunidad realmente vibrante y vital, llena de gente interesante y que acepta la diversidad. 

SS: ¿Cómo es Chester?

LG: Chester es una ciudad de unos 4,200 habitantes. Chester fue originalmente un pueblo de fábricas creada en los 1600’s y reconocida como municipio, creo, en 1836. Tenemos muchas vías acuíferas, muchos arroyos, ríos y riachuelos. Eso proporcionaba la energía para todas las fábricas que había aquí. Esas fábricas, la mayoría de las originales, ya no operan. 

En algún momento entre los años 70 y los 90, gente de otros lugares descubrió Chester. Entonces, mucha gente vino y tuvo casas de fin de semana aquí. Algunas personas que se retiraron del mundo del espectáculo en Nueva York vinieron aquí por la escena teatral. El centro de la ciudad es muy animado, muy artístico, lleno de escritores, artistas, abogados, profesores y todo tipo de gente. Aunque no tenemos ganaderos, sí tenemos algunos agricultores. 

SS: ¿De qué se siente más orgullosa de haber logrado como primera concejal?

LG: Estoy muy orgullosa de que nos hayamos comunicado bien entre nosotros en tiempos de crisis. Tuvimos un par de huracanes, una inundación repentina que destruyó carreteras y puentes. Por supuesto, tuvimos la pandemia. Así que la comunicación con el público, especialmente en una ciudad pequeña sin un periódico o una emisora de radio, tiene que ser creativa para que el gobierno pueda conectar con los residentes. 

También hemos actualizado mucha infraestructura. Yo no empecé el proceso. Lleva fácilmente unos 15 años. Pero la parte más difícil de lo que llamamos el proyecto de la calle principal aquí, yo diría que ocurrió en medio de la pandemia. Tuvimos que rehacer por completo nuestras carreteras y el drenaje, la red de agua, las aceras, la iluminación y todo el centro. Y tratar de compaginar la pandemia con la realización de ese trabajo fue difícil, pero es absolutamente hermoso.

Realmente siento que, junto con mi equipo, hemos hecho un trabajo muy, muy bueno en Chester. Pero, al igual que Carbondale, Chester no es un lugar roto que necesite ser arreglado. Sólo necesitaba, y sigue necesitando, cuidados, atención y mantenimiento.

SS: ¿Cómo influye su experiencia como Marine en su liderazgo?

LG: Cuando me alisté en el Cuerpo de Marines, lo hice por desesperación, porque no tenía dinero. Mi familia estaba pasando por una situación difícil y era el momento de madurar e irme, encontrarme a mí mismo en el mundo y averiguar dónde encajaba. Ni en un millón de años soñé con quedarme. Pensaba que cumpliría mis cuatro años, saldría y volvería a la universidad y obtendría mis beneficios educativos, etc. Pero no dejaron de ofrecerme grandes oportunidades, trabajos fascinantes en lugares interesantes. Creo que lo mejor que hizo el Cuerpo de Marines por mí fue que me hizo crecer. Me dio un buen sentido de quién soy y de lo que puedo lograr. Y eso es muy valioso. No puedes poner precio a esto. 

SS: Así que, después de recibir sus beneficios de educación, ¿decidió estudiar español?

LG: Cuando estaba en el servicio, y estuve casada con un Marine, tuvimos la fabulosa oportunidad de ser enviados a Sudamérica. Y eso fue lo que realmente hizo que me fascinaran los estudios latinoamericanos y el español.

Se lo he dicho a mis hijos, conocer o aprender otro idioma te abre una parte del mundo que de otro modo no experimentarías. Solía tener la meta de hablar cuatro idiomas al llegar a los 75 años. Me he quedado muy atrás. 

SS: ¿Qué es lo que más anhelas de cara al futuro?

LG: Bueno, siempre estoy preparada para una nueva aventura. Me entusiasma volver al oeste y estoy muy emocionada de conocer mejor Carbondale. Me impresionó mucho el personal del ayuntamiento y también los residentes y empresarios que conocí.

Y lo repito, no solicité este trabajo por pensar que Carbondale necesita ser arreglado. Apliqué para este trabajo porque, de hecho, Carbondale estaba haciendo un trabajo muy duro en el aspecto de ser una comunidad real y tener personalidad y vitalidad. Me entusiasma formar parte de eso.