Cuando hablamos de familia, nos referimos “al grupo de personas que viven juntas bajo la autoridad de una de ellas. Conjunto de ascendientes, descendientes, colaterales y afines de un linaje”. Según el Diccionario de la Real Academia Española. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, familia son “los miembros del hogar emparentados entre sí por sangre, adopción y matrimonio, hasta un grado determinado”. La sociedad va evolucionando y con ella una de sus instituciones más importantes: la familia. Lo que no ha cambiado es el objetivo con el que cada miembro se incorpora a la pareja para formar una familia, tener una vida más feliz y plena. Para ello intercambian conductas y comparten, desde un punto de vista social, una serie de bienes y actividades. Un recurso muy valioso que se comparte en la familia es el tiempo. Es cierto que todos tenemos actividades obligatorias, como el trabajo en el caso de los adultos o la escuela para los más jóvenes o pequeños, además de, tiempo de descanso, de cuidado personal y del hogar, junto con otras responsabilidades ineludibles, con frecuencia fallamos en designar tiempo para la recreación.
Disfrutar de espacios de tiempo libre, llevando a cabo actividades recreativas con la familia puede resultar muy provechoso, esto contribuye a una buena comunicación y convivencia. Es relevante que los padres creen y amplíen los momentos de ocio en familia, que sean creativos y dinámicos. Esto resultará en el desarrollo personal y educativo de cada miembro de la familia, así como en una mejora en la armonía y la unidad familiar e incrementará la autoestima y la autoconfianza especialmente en los hijos. Las actividades recreativas son tan importantes como cualquier otro segmento de nuestras vidas, el practicarlas regularmente nos trae incontables beneficios.
Algunas sugerencias de actividades a realizar en su tiempo libre son:
Salir a caminar, correr o andar en bicicleta. Disfrutar la música, pintar, construir un barco, leer, acampar, pescar, solo por mencionar algunas. Vivimos en un lugar tan lleno de belleza y a nuestro alcance hay incontables posibilidades recreacionales, algunas de ellas incluso son totalmente gratuitas. En realidad, las actividades recreativas pueden incluir cualquier cosa en la que uno o más miembros de la familia tengan interés. Lo que importa no es tanto que hacer si no porque lo hacen, el propósito debe ser experimentar juntos, disfrutar, e integrarse aún más como familia.
Frecuentemente usamos el término ocio de una manera negativa, en realidad el ocio es una actividad libre que realizamos por gusto, por placer, es algo que disfrutamos. El ocio es esencial para la salud física y emocional. No debemos tomar esto como una justificación para la pereza o la irresponsabilidad, hay un tiempo para todo, y debe haber un balance en la manera que usamos nuestro tiempo. Tampoco debemos sentirnos culpables al tomar estos tiempos de descanso en familia, son más bien una inversión.
Repito, el énfasis no es tanto en lo que se ha de hacer, sino en porque se hace. Este tiempo es para fortalecer la integración familiar y los lazos de comunicación. (classicsofttrim.com) Además de ayudar a los niños y jóvenes a ocupar su tiempo con actividades sanas, disminuirá el aburrimiento, encontrará nuevas aficiones. Años atrás, mi esposo, nuestros hijos y yo, nos preparamos para acampar un fin de semana, solo que no hicimos reservación en ningún lugar, manejamos más de dos horas solo para encontrar que el campamento que nos interesaba estaba lleno, pasamos el resto del día buscando dónde instalarnos para finalmente regresar a casa. ¡Fue una experiencia divertida! creamos una memoria y aprendimos una lección.
A la hora de planear alguna actividad recreativa, tome en cuenta los gustos de sus hijos. Evite la tentación de solo sentarse frente al televisor, si deciden ver una película, entonces al final comente con su familia, qué lecciones aprendió de la historia o los personajes, etc.
El uso de las redes sociales nos permite asomarnos a actividades que otras familias están realizando, evite la tentación de competir o comparar, cada familia tiene sus propios intereses y recursos, estos pueden variar entre sí, sea agradecido y muestre a su familia que satisfecho está de poder pasar tiempo de calidad con ellos.
Finalmente, si esto es algo que usted ha estado practicando, busque nuevas y divertidas maneras de recrearse en familia. Si no lo ha estado haciendo, empiece ahora. Aparte el tiempo y dedíquelo a disfrutar en familia. Al hacer de estas actividades recreativas un hábito familiar, estará creando memorias maravillosas en la mente y el corazón de su familia que seguramente atesorarán por siempre. Dele a su familia su atención completa, ellos lo apreciarán.