Esquina Legal -- Tony Mendez

Recientemente leí un artículo en Colorado Lawyer, una revista publicada por la Asociación de Profesión Legal, sobre disoluciones de matrimonio con personas de alto conflicto y pensé que sería informativo compartirlo aquí. 

Las personas de alto conflicto se describen mejor como alguien que actúa en una forma que tiende a incrementar el conflicto en vez de reducir o resolverlo. Esta tendencia de la persona aparece repetitivamente, en muchas diferentes situaciones, y sin importar quién está alrededor. 

En cualquier situación de alto-conflicto, siempre se encuentra a una persona a quien se le puede llamar el “iniciador,” y a otra persona, conocida como la persona “objetiva.” En situaciones de divorcio, un esposo, una esposa, o hasta los abogados pueden ser el iniciador. 

La persona objetiva es frecuentemente aquel o aquella quien está tratando de enfrentar años de abuso psicológico, navegar el divorcio, y defenderse. La persona objetiva puede aparecer como que no se puede enfocar en soluciones con visión hacia el futuro, o que no puede tomar decisiones que parecen fáciles y obvias hacia los demás. Los iniciadores son expertos en provocar sutilmente a la persona objetiva en un comportamiento extremo para perjudicar los procedimientos judiciales a su favor. 

El problema con divorcios involucrando a personas de alto conflicto es que las cortes no están preparadas para abordar adecuadamente estos divorcios y los profesionales quizás no tienen el entrenamiento para abordar las necesidades de la persona objetiva. Intervención enfocada y educación pueden ayudar a mejorar los resultados en esta situación. 

Las personas quienes acostumbran caminar de una manera precavida también pueden evitar conflicto, evitar ser sobre emocional, y agresivos. Estas personas deben tratar de mantenerse asertivas y pensar estratégicamente, no reaccionar a el iniciador. Parte de la solución es aprender a cómo comunicarse con el iniciador. 

Cuando existe un intercambio enfadoso entre el iniciador y la persona objetiva, hay que aprender a desacoplarse de la situación y desescalar el intercambio. Esto se puede hacer usando el método BIAF. BIAF es un acrónimo que significa: Ser Breve, Informativo, Amistoso, y Firme. 

Ser breve significa que las respuestas de la persona objetiva son cortas. Típicamente, el iniciador puede inflar la situación y mandar un millón de mensajes o pocos mensajes pero largos. Al responder brevemente, la persona objetiva sólo responde a lo necesario y le da al iniciador menos información la cual puede reaccionar. 

Lo segundo es ser informativo. Al responder a un iniciador, o a una persona de alto conflicto, uno solo debe dar la información necesaria, y no enfocarse en las emociones, opiniones, defensas, o argumentos propios. Esto, de nuevo, tiene el propósito de limitar responder en una manera emocional, sin dar opiniones, o actuar en defensa, y sin argumentar. Esto debe ayudar a evitar escalar la situación aún más. En vez, el enfoque debe ser en proveer información relevante mientras uno maneja las emociones y respuestas. 

La tercera parte del acrónimo BIAF es ser amigable. Aunque esto puede ser difícil para una víctima de una persona de alto conflicto, tomando un tono cordial evita enemistad entre los partidos y puede calmar al iniciador. Ser amigable, o sea saludar a la persona dentro del mensaje o decir adios dentro del mensaje, puede ser suficiente para desacoplar a la otra persona. 

Finalmente, el F de BIAF significa ser firme. Responder al otro lado en una manera firme, o reducir la comunicación hacía una solución de dos opciones, puede ayudar en evitar de que la conversación se agrande y cierra la puerta a más abuso. 

Aunque tratar con una persona de alto conflicto no es fácil, es posible todavía comunicarse con él o ella en una manera efectiva usando el proceso de BIAF.